Después del fantástico Bizcocho mármol terrorífico de la semana pasada os traemos una idea un poco más tradicional para Halloween, ¡Flan de calabaza!
Realizar este flan de calabaza es tan sencillo como hacer un flan de huevo tradicional, necesitaremos los siguientes ingredientes:
En primer lugar cocemos la calabaza, tarda muy poco en cocer, con diez minutos bastará. Con ayuda de un tenedor la convertimos en puré y reservamos.
Mezclamos en un bol los huevos, la leche condensada y evaporada, el puré calabaza y la esencia de vainilla, mezclamos todo muy bien hasta que esté perfectamente integrado y sin grumos de calabaza.
Cubrimos con caramelo líquido la flanera o molde que hayamos elegido y vertemos en él la mezcla. A continuación cocinamos una hora al baño maría en el horno. Cocinar al baño maría es tan sencillo como poner agua en la bandeja del horno, sin que esta entre al molde, y cocinar a temperatura media.
Una vez listo lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar, hasta que este lo suficientemente frió como para poder ponerlo en la nevera. Cuando este bien frío podemos desmoldarlo y servirlo.
Tiene el delicioso sabor del flan de huevo tradicional con un recuerdo de calabaza que le da un toque nuevo y diferente.
Acompañando nuestro flan tenemos nuestros adorables y nada terroríficos fantasmas DIY. Los vimos en Mr. Printables y nos parecieron ideales. La explicación de cómo se hacen la podéis ver aquí. En el mismo enlace están los descargables para hacer esta monada de fantasmas.
Una vez descargada la plantilla sólo hay que encerar el papel (no es obligatorio, pero es lo que les da el toque translucido a los fantasmas y es muy fácil de hacer), recortar, doblar todas las lineas de puntos y pegarlos.
Originalmente están pensados para ser cajitas, pero nosotras los hemos usado meramente como objetos decorativos.
¡Esperamos que os guste la receta y la idea de decoración!
Srta. Cookies*
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